La felicidad va mucho más allá del dinero que ganas y de lo que tienes, incluso de la posición social que ocupas en el lugar de donde vives y de esas cosas superficiales que crees que necesitas.
Desde que somos pequeños se nos enseña a sonreír para las fotos, a ocultar lo que realmente sentimos y a no dejar que la gente vea la “procesión que llevamos por dentro”. Aunque es cierto que la felicidad no es un estado permanente, ¿qué tan feliz y realizada con tu vida estás realmente?
Contesta este sencillo test con honestidad, y mira el resultado al final.